martes, 16 de octubre de 2012

¿PUEDO CAMBIAR MI PRÁCTICA EN EL AULA?




                “Si buscas resultados distintos no hagas siempre lo mismo”
Albert Einstein

Una buena cita ahorra  muchos párrafos de disquisiciones filosóficas. Sobre la necesidad, hoy por hoy tan cuestionada, de la formación permanente del profesorado no voy a decir ni una frase justificativa más y me remito a la cita.
Si quieres cambiar resultados, cambia tus prácticas. Si puedes cambiar las prácticas sin formarte, no te formes.
Yo soy un tío muy limitado, tengo que reconocer que me cuesta mucho tiempo y esfuerzo cambiar mis propias prácticas profesionales cuando reflexiono solo, sin referentes, sobre lo que hago y sobre lo que querría hacer. ¡Qué le voy a hacer!
También he llegado al convencimiento de que acudiendo a actividades formativas, por muy buenas que sean, tampoco cambio fácilmente mis prácticas, ni mejoro los resultados de mi alumnado. Conozco, aprendo, asimilo formas diferentes de actuar que me convencen más o menos, que me motivan mejor o peor para que yo pueda cambiar.
Y ahora estoy seguro de una cosa, el que tiene que cambiar soy yo. Si yo no cambio, mis formas de actuar cotidianas, muy elaboradas y asentadas, muy en sintonía con mi forma de ser, pensar y actuar actuales se impondrán.
Ya he comprobado que mover un elemento, integrar una estrategia metodológica concreta, un tipo de tareas… de forma aislada dentro de un contexto cotidiano uniforme no cambia unos resultados,  y por lo tanto, nos convence de la inutilidad de las innovaciones. El dicho: “más vale malo conocido, que bueno por conocer”.
Por lo tanto si quiero obtener resultados distintos tengo que estar concienciado de empezar a cambiarme a mí mismo.
La formación que merece la pena es un trabajo de mejora personal y profesional y debe servir para aumentar mis niveles de felicidad individual,  la de mi alumnado y la de todos los que se relacionen conmigo .

No hay comentarios:

Publicar un comentario